El mármol, César Aira

Con una tirada de 1500 ejemplares La Bestia equilátera reedita un entretenido y delirante texto del prolífico (sí, ya sabemos que se dice mucho la palabra prolífico seguido del apellido Aira pero así son las cosas mientras este buen hombre siga escribiendo libro tras libro) Aira. En primera persona, el protagonista confiesa que quiere plasmar en papel una imagen que no logra componer. No tiene mejor idea que comenzar a relatar poco a poco sus recuerdos y la locura está servida.

El lector se sorprenderá riéndose mientras lee “El mármol” y está muy bien que pueda hacerlo. También está muy bien que pueda buscar este o cualquier libro de Aira para deslumbrarse con una literatura que recuerda a esos juegos donde hay que componer una imagen uniendo puntos numerados. La clave en la escritura de Aira es que cuando suponemos que el dibujo está concluido nunca es así. Y nuevos puntos siguen apareciendo. Y se abren nuevas puertas y nuevos ribetes. Desopilantes. Llegamos a un universo digno de Alicia donde todo puede ser posible. Entonces hay dejarse llevar para disfrutar plenamente de una de las plumas más talentosas.

(Publicado el 29 de enero de 2015 en la sección “Libros” de Punto a Punto). 

Mr Mercedes, Stephen King

Una nueva creación del maestro más consagrado del suspenso y el terror. Stephen King no logra eludir registros algo trillados, como el homicida psicópata que mantiene una relación edípica con su madre o el policía retirado que se involucra para intentar resolver un caso pendiente. Aún así Mr Mercedes tiene una trama que avanza velozmente y sus casi 500 páginas se leen sin tropiezos. Bill Hoges es el inspector retirado que alterna sus días entre la televisión de dudoso contenido y el alcohol. La jubilación le cayó casi tan mal como su soledad. Hasta que un contacto inesperado lo arrastra hacia sus días de actividad. Mr Mercedes o “el asesino del Mercedes” le escribe una carta –de carne y hueso- con el que empezará una laberíntica carrera donde cazador y cazado van intercambiando sus roles. Entretenido thriller que seguramente será llevado a la pantalla grande.

(Publicado el 29 de enero de 2015 en la sección “Libros” de Punto a Punto). 

Escritos libertarios, Albert Camus

En momentos en que la libertad de prensa, de expresión, de pensamiento están en jaque, es gratificante (y valioso) encontrar las referencias claras de uno de los escritores y pensadores más importantes que diera Francia. Albert Camus se hubiera escandalizado al leer los “pero” y “sin embargo” que muchos analistas emplearon para referirse a la masacre que segó la vida de 12 periodistas del semanario Charle Hebdo en una acción para “vengar al profeta Mahoma”. Escritos libertarios reúne buena parte de las manifestaciones públicas del Nobel de Literatura en torno a la necesidad de acorralar en su mínima expresión a la violencia y de proteger la libertad con toda vehemencia.

El fervor libertario de Camus no se limitaba a sus creaciones literarias. Era un militante de los valores republicanos y se sumaba a toda causa que los abrazara. Sus palabras, su firma, su apoyo político estaba con los republicanos vencidos de España, con los presos políticos de De Gaulle, en su oposición al FLN argelino o en su solidaridad con los oprimidos intelectuales húngaros. Conociendo la utopía de predicar la no violencia, Camus tomará partido por una posición más pragmática para promover sus luchas políticas: “No diré que hay que suprimir todo tipo de violencia, eso sería utópico. Solamente digo que hay que rechazar cualquier legitimación de la violencia Me horroriza la violencia cómoda, es un poco fácil matar en nombre de ley o de la doctrina”. Contundente.

(Publicado el 20 de enero de 2015 en la sección “Libros” de Punto a Punto). 

Locura y arte, Adrián Sapetti

Con “Locura y arte” tenemos un libro que ofrece presentar los “demonios y pesadillas de los artistas que hicieron más bella a la humanidad”. El problema del libro es que se ajusta tan estrictamente a esa promesa inicial que sólo se queda en eso. Es una presentación fugaz, liviana, apenas un vuelo rasante como una especie de trabajo de supervisión donde convocamos a los principales artistas universales y nos limitamos a comprobar si han traído sus penas psíquicas con ellos. No hay una intención de conocer con mayor profundidad cómo se manifestaron y evolucionaron los suplicios que los atormentaron. Sí hay referencias, pero con poco ánimo de recorrer raíces. Sin embargo, es un trabajo interesante por el perturbador efecto que logra al mostrarnos a los principales exponentes de las letras, la pintura, la música y la filosofía, repasando sus creaciones junto a la sombra de las diversas manifestaciones de trastornos mentales.

Son objeto de esta mirada creadores de la talla de Allan Poe, con la depresión que lo acompañó desde infante, Dalí, con su megalomanía y su autogestionado rol de loco, un alienado Van Gogh, el surrealista Artaud atormentado por su psicosis paranoide que lo llevaría a vivir 9 años en un asilo, las vidas acorraladas por el alcohol de Rimbaud, Baudeliere o Hemingway, la depresión e impulso suicida de Pizarnik o Quiroga, la demencia paranoide que postraría a Nietzsche, entre muchos otros. Psiquiatra de profesión, Sapetti dirá que la locura no es condición indispensable para la creación artística, aunque sí percibe “una ruptura en la vida apacible y no creativa de lo cotidiano, un quiebre en el plano de lo real en el que se produce un desborde de la razón”.

(Publicado el 20 de enero de 2015 en la sección “Libros” de Punto a Punto). 

Para Isabel , Antonio Tabucchi

Tabucchi falleció en 2012 y esta es la primera novela que se conoce de él póstumamente. Las principales religiones orientales, el budismo, el hinduismo, emplean un instrumento sumamente bello y ornamental en sus formas para representar al cosmos y a lo que interpretan como su universo. Una mandala es eso, una representación simbólica del macro y el microcosmos que es, a la vez, una suerte de mapa para guiar el destino de las personas que profesan esas creencias.

Tadeus se embarca en una búsqueda que, aunque no se advierta desde un principio, lo sumergirá en un mandala. Trazará con sus pasos círculos concéntricos hasta llegar al punto final, al centro, “al conocimiento” ¿Pero qué busca conocer? Ni el origen de la existencia, ni la razón de la vida. O todo ello, pero resumido en un nombre: Isabel. El destino de esa mujer es lo que lo desvela y lo lleva a transitar un mandala que lo colocará en distintos escenarios, ante distintas personas, en nuevos círculos. Una búsqueda gratificante que nos hará recorrer un mandala propio para reencontrarnos con uno de los autores italianos más talentosos y sensibles.

(Publicado el 20 de enero de 2015 en la sección “Libros” de Punto a Punto). 

La buena nueva de los libros del Caminante, Fogwill

Fogwill propone aquí una travesía delirante, entretenida y virtuosa a la vez. Mentirá y dirá que con este “librito” la empresa original era construir un relato a manera de diario de viaje. Pero el propio autor se pierde en sus laberintos personales y comienza a tejer una maraña de historias y reconstrucciones autobiográficas deliciosas. El creador de Los Pichiciegos escribió “La buena nueva… en 1990 y con el tiempo habría de convertirse en una de las maneras más fieles de conocer buena parte del universo Fogwill y de mucha de la historia íntima de sociólogo.

Con todo, este trabajo excede ampliamente los límites de propuesta autobiográfica y también provee algunas claves para entender la sociedad argentina bajo el cristal con que mira Fogwill. Atentos a este detalle, porque Fogwill tiene (tenía) uno de los mejores cristales para decir lo que hay que decir y sería un desperdicio imperdonable no aprovecharlo. Aquí, hastiado por las presiones de su círculo familiar y aburrido por una sociedad quilmeña y argentina que lo sujetaba en un cómodo tedio decide largarse a marchar. Buscará convencerse de las ventajas de la marcha, se formará en la “filosofía” que la sustenta y comenzará a marchar para ya no volver a ser el mismo.

(Publicado el 12 de enero de 2015 en la sección “Libros” de Punto a Punto). 

El libro de las pruebas, John Banville

Freddie Montgomery asegura que no busca ser comprendido. Que no escribe este testimonio buscando dar excusas insólitas ante lo que hizo. Lo que hizo, hecho está. Pero necesita contarlo para entender. Para entenderse. Hay algo del Raskólnikov de Crimen y Castigo en el descenso y en el “mareo” que siente Montgomery ante la tragedia que lo tiene como protagonista y autor. Hay algo de la mecánica propia de los asesinos de A Sangre Fría en sus movimientos. Él habla por él y los asesinos hablaron a través de las líneas de Capote, pero algo los hermana.

Entre los movimientos sórdidos de estos y el estupor y confusión de Raskólnikov se sitúa el protagonista de esta inquietante novela de Balville. “Porque la persona que estaba dentro también era extraña para mí, de lejos, mucho más extraña que el ser físico y conocido”. Empujado por una deuda mafiosa Montgomery deberá volver a su tierra natal y lo que amenazaba con ser un complicado retorno se convierte en un descenso sin límite que lo enfrentará con lo peor de él mismo. Inquietante novela publicada originalmente en 1989 y que puede usarse para empezar a conocer a este galardonado autor irlandés.

(Publicado el 12 de enero de 2015 en la sección “Libros” de Punto a Punto). 

Los Beatles como músicos, Walter Everett

A la altura de lo que fueron los Beatles para la música contemporánea, este libro representa un exhaustivo trabajo para desmenuzar sus creaciones desde una óptica pocas veces encarada. Dejando al margen los cientos de estudios para analizar las letras de sus canciones, sus recorridos biográficos, sus historias íntimas o sus motivaciones espirituales y políticas, en este trabajo de más de 500 páginas se pone el foco en el examen de la música que crearon John, Paul, George y Ringo. Un libro técnico (con la recomendación de que el lector debe tener, para su comprensión completa, una formación musical de al menos dos años) pero profundamente atractivo para sumergirse en el proceso de composición, grabación y arreglo de los LP y singles de los Beatles.

Para esta tesis monumental Everett toma el abanico de producción que supone el lanzamiento de Revolver (1966) hasta The Beatles Antologhy (un proyecto que comenzaría en 1970). Las primeras influencias musicales de los Beatles, la incorporación progresiva de instrumentos y arreglos en estudio, la influencia de la experimentación con LSD, con los happening psicodélicos y con la música del norte de la India, todo ese contexto también está presente y contemplado siempre con la empresa final de diseccionar, acorde por acorde, la música del grupo más importante e influyente del que se tenga registro. El libro incluye un apéndice “A” con los instrumentos tocados por los Beatles en el último período, un apéndice “B” con los amigos musicales de los Beatles y finalmente una tabla de funciones de acordes y un glosario. Imperdible.

(Publicado el 5 de enero de 2015 en la sección “Libros” de Punto a Punto). 

El hambre, Martín Caparrós

Martín Caparrós se embarcó en una titánica empresa: tratar de entender y reproducir los mecanismos con los que opera uno de los mayores (sino el mayor) flagelos que ataca a la humanidad desde siempre: el hambre. El resultado es este libro, un libro sumamente difícil de transitar, muy bien escrito, muy bien documentado, pero desgarrador en su forma y fondo.

En El Hambre, Caparrós combina los tremendos testimonios de quienes conviven a diario con la falta de comida y con la certeza de que sólo un milagro los sacará de su situación (los pobres de Níger, Bombay o Bangladesh, por citar algunos lugares que visitó) junto a un trabajo de recopilación de datos e indicadores económicos y de una permanente revisión y reconstrucción de algunos procesos históricos y culturales para dar cuenta del fenómeno hambre con perspectiva más amplia. “Y entonces, el sentido más estricto de la palabra supervivencia: miles y miles de personas que se levantan cada día para ver si consiguen que comer…no es fácil, en esas condiciones pensar en nada a largo plazo. El futuro es el lujo de los que se alimentan”.

(Publicado el 6 de noviembre de 2014 en la sección “Libros” de Punto a Punto). 

Que el mundo me conozca, Alfred Hayes

Los sueños de una aspirante a actriz, el desencanto y cinismo de un escritor y guionista de películas, Hollywood de fondo, mucho alcohol y sentimientos que no llegan a mostrarse como realmente son. Ese es el cóctel que prepara Hayes para dar vida a una novela entretenida, que se lee de un tirón y que no deja de ser un impecable lente para meterse en la piel de uno y otro personaje como si fueran la perfecta cara de una sociedad americana de mediados de siglo 20: melancólica, hastiada, desesperanzada, aburrida, somnolienta.

Una muchacha con intenciones suicidas se adentra al mar captando la atención del escritor quien se mete al agua para rescatarla. La juzgara fea en un principio, luego pensará que no está mal y finalmente no comprenderá como una muchacha tan bella como ella ande por la vida así, sin destino y sin una mano con intenciones sinceras que la acompañe. El tampoco podrá ser ese compañero y la novela girará en torno a ese desencuentro para poner como telón de fondo la discusión sobre las dobles intenciones, las vidas paralelas y los fraudes, fracasos y frustraciones que representan cientos de humanidades.

(Publicado el 5 de enero de 2015 en la sección “Libros” de Punto a Punto).